Nuestra Visión.
Ser una iglesia fundamentada en la suficiencia de las escrituras.
Nuestra Misión.
Buscar a las personas que están apartados de Cristo, para que vivan y abrasen a Cristo.
Nuestros Valores:
1. Conocer, adorar, glorificar a Dios.
Dios es todo lo que las personas necesitan, él es el centro de todo, lo que gira alrededor.
Comportamiento esperado:
La persona ha dejado de vivir para sí para vivir para Aquel que murió y resucitó por él.
Su vida de obediencia es simplemente el fruto de amar a su Dios.
Su gozo en la vida es el reflejo de su agradecimiento a su redentor.
Una búsqueda intencional en crecer en el conocimiento de Dios.
2. Adorar a Dios sobre todas las cosas.
Conlleva una vida rendida por completo a Dios para honrarlo y glorificarlo en todo lo que somos, mente, corazón y voluntad, y en todo lo que hacemos, como una continua ofrenda y sacrificio vivo, aceptable y agradable a Él.
Comportamiento esperado:
Vivir consciente de que somos templo del Espíritu Santo.
Procurar una vida devocional íntima y disciplinada.
Que cada decisión muestre que solo sirvo a los propósitos y voluntad de Dios y no a otro dios, aun sea yo mismo.
Vive de manera gozosa y agradecida.
Una vida caracterizada por devoción a Dios.
3. Mostrar amor al prójimo.
Mostrar en nuestras relaciones con los demás, en palabras y en hechos, el amor con que Cristo nos ha amado.
Comportamiento esperado:
Amar sin distinción.
Compromiso con los necesitados.
Perdón incondicional.
Ser un pacificador.
Considerar al otro como más importante que nosotros mismos.
4. Enseñar la vida familiar.
Fortalecer y desarrollar la familia conforme a lo revelado en la Palabra de Dios.
Comportamiento esperado:
Matrimonios que reflejan la unión de Cristo con su Iglesia.
Esposo que ama, lidera y se entrega a su esposa e hijos.
Esposa como ayuda idónea, que se somete al liderazgo espiritual de su esposo.
Hijos que honran a sus padres.
Padres que no provocan los hijos a ira.
Padres que se preocupan y se interesan en el crecimiento espiritual de su familia.
5. Deber con nuestra visión.
Abrazar de manera voluntaria y con convicción la visión dada por Dios a nuestra iglesia, asumiendo así la responsabilidad de apoyarla.
Comportamiento esperado:
Conoce, vive y defiende la visión.
Promueve y enseña a otros cómo vivir la visión.
Se sacrifica por alcanzar la visión.
Comprometido con mantener la unidad del cuerpo de Cristo dada por el Espíritu Santo.
6. Vidas Cambiadas. (1 Pedro 1:15-19)
Hemos sido separados y dedicados para Dios de manera exclusiva. Es poner en práctica nuestro llamado a ser santos, como Dios es santo, procurando mantener la separación entre lo extraordinario de Dios y lo ordinario del hombre.
Comportamiento esperado:
Resistencia a ser conformado a las corrientes de este mundo.
Fidelidad a Dios y a su Palabra.
Santificación progresiva hasta la medida de la estatura de Cristo.
Compromiso con servir a Dios y a su pueblo a través de los dones y talentos recibidos.
7. Deber con nuestra Misión.
Abrazar de manera voluntaria y con convicción la misión dada por Dios a nuestra iglesia, asumiendo así la responsabilidad de apoyarla.
Comportamiento esperado:
Conoce, vive y defiende la misión.
Promueve y enseña a otros cómo vivir la misión.
Se sacrifica y apoya para alcanzar la misión. Ser un contribuidor y no solo un consumidor.